La temporada 2024 ha dejado una serie de hitos muy resonantes y uno de ellos fue la completa inserción de Ollie Bearman como piloto de Fórmula 1. El joven británico tuvo una repentina irrupción en Ferrari para reemplazar a Carlos Sainz en el Gran Premio de Arabia Saudita y, tras una sólida actuación, Haas le abrió las puertas para convertirlo en piloto titular de cara al próximo año. Sin embargo, ya dejó en claro que su gran objetivo es “volver a verstirse de rojo”.
La carrera de Ollie Bearman tomó un cambio repentino a principio de la temporada 2024, cuando se encontraba en Arabia Saudita para afrontar la segunda fecha de la Fórmula 2. Allí, el apendicitis que sufrió Carlos Sainz implicó en que se le abriera la posibilidad de tomar su lugar y conducir para Ferrari ese fin de semana, justo en un trazado urbano en el que los muros implican un riesgo enorme.
“No tuve mucho tiempo para ponerme nervioso porque estaba ocupado aprendiendo todo lo posible, pero diría que fue bastante impactante lo que sentí en ese momento. El término miedo es el más correcto para describir lo que sentí”, confesó a medios italianos el joven piloto, que por aquel entonces tenía 18 años.
Sin embargo, la reflexión lo lleva a entender que su enorme actuación en esa carrera tan exigente y casi sin preparación fue un factor determinante para convertirse, rápidamente, en un elegido para la parrilla del 2025. “Lo que pasó aceleró el proceso y me dio la oportunidad de demostrar de lo que era capaz», sostuvo Ollie Bearman.
La realidad indica que, después de haber tenido una deslumbrante carrera formativa, el piloto nacido en Chelmsford tuvo problemas en la Fórmula 2, ya que en el primer año estuvo lejos del título y de su compañero Frederik Vesti, mientras que en este 2024 le costó sumar resultados impactantes.
En cuanto a las diferencias entre ambos monoplazas, Bearman le atribuye un cambio radical: “En primer lugar el comportamiento de conducción es completamente diferente, esto me hizo la vida un poco más difícil. En F1 me siento más natural, tiendo a encontrar el límite más rápido. En la F2 cometo más errores, no me siento natural. Incluso cuando estoy en excelentes posiciones no me siento muy seguro con el auto”.
En ese sentido, agregó: “Cuando me pongo al volante de un Fórmula 1 estoy ‘como en casa’ porque creo que mi estilo de conducción se adapta mucho más a este tipo de coches. Mi forma de atacar la cúspide rinde más en términos de tiempo de vuelta en las principales series, a diferencia de la Fórmula 2”.
2025, un año de consolidación para Ollie Bearman
Ollie Bearman sabe que le esperan grandes desafíos de cara a 2025, donde completará la temporada con el equipo Haas. “Estoy deseando afrontar los retos que me esperan y medirme finalmente con los mejores del mundo. Los viajes y el compromiso serán muchos más, por lo que mi vida será más agitada y complicada, pero no puedo esperar por nada más», agregó.
La Fórmula 1 tendrá una drástica renovación de cara al próximo año, con la irrupción de cinco pilotos jóvenes que han llegado con grandes pergaminos. Uno de ellos es Andrea Kimi Antonelli, quien fue compañero de Bearman en Prema y que fue anunciado por Mercedes. En cuanto a las expectativas sobre cómo pueda rendir, Ollie indicó: “Kimi es un piloto muy rápido, eso lo aseguro. Es un buen tipo, lo considero un querido amigo y estoy feliz de que estemos juntos en la F1«.
En cuanto a sus objetivos, el piloto que utilizará el número 81 lo tiene bien claro: espera volver a demostrar su valía para retornar a Maranello. “Crecer y correr para Ferrari ha sido el mayor orgullo de mi carrera. Espero volver a vestir de rojo muy pronto”, sostuvo Bearman, el único integrante de la Academia de Pilotos de Ferrari que estará en la parrilla de la Fórmula 1, exceptuando el caso de Charles Leclerc, claro está, quien ya forma parte del equipo principal.
Ollie Bearman tuvo un sólido comienzo en la Máxima. No solamente se destacó en Ferrari, sino que estuvo a la altura del ritmo de Nico Hulkenberg cada vez que se subió a Haas y, si bien padeció algunos inconvenientes en la lluvia de Interlagos, su rendimiento genera grandes expectativas de cara a la próxima temporada.
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