Red Bull ha sido la referencia de la Fórmula 1 en los últimos años. Sin embargo, los últimos meses no estuvieron exentos de desafíos y problemas que derivaron en salidas. Por eso, el equipo afronta una reestructuración interna y, a la vez, se prepara para dar su primer paso con la generación de su propia unidad de potencia de cara a 2026. Por eso, Christian Horner considera que están por afrontar un momento jamás antes vivido desde su comienzo en la Máxima categoría.
El equipo de Milton Keynes ha perdido una serie de recursos humanos importantes de cara a este año, entre los que sobresalen nombres como el de Adrian Newey y Jonathan Wheatley. Sin embargo, Horner cree que los cambios pueden llegar a ser positivos y se muestra optimista para el futuro.

“Es necesario que haya una evolución dentro de cualquier organización. Si miro nuestra oficina de ingeniería hoy y la comparo con 2013, que fue la última vez que tuvimos cuatro campeonatos mundiales consecutivos, tal vez haya tres personas allí que estuvieron allí en 2013”, indicó el británico, alegando que la reestructuración también puede estar cargada de éxitos.
En ese sentido, comentó que el equipo ya se ha adaptado a trabajar sin estas dos piezas, aunque también admite su relevancia. “Lo de Adrian ocurrió muy temprano en la temporada y el equipo se ha adaptado. Por supuesto, lo extrañamos. Ha jugado un papel tremendo en el equipo durante su tiempo aquí”, indicó Horner con respecto a Newey.
Por otro lado, afirmó que en el caso de Wheatley “los roles se han redistribuido y están siendo operados por diferentes miembros del equipo”. En ese sentido, afirmó que “es emocionante para ellos porque les da nuevas oportunidades”. Además, se mostró contento a nivel personal con el paso de Jonathan al proyecto de Audi.
«Estoy seguro de que será un activo para ellos», le dijo Horner a RacingNews365. “Es algo que ha esperado durante algún tiempo, así que cuando tuvo la oportunidad, lo animé a aprovecharla. Lo alenté y lo apoyé por completo, diciéndole ‘vamos, hazlo. Te arrepentirás si no lo haces’”, añadió.
2026 marca un nuevo comienzo para Red Bull
El 2025 señalará el fin de la exitosa sociedad entre Red Bull y Honda para dar paso a una nueva era. Los japoneses se irán a trabajar con Aston Martin, mientras que el equipo de Milton Keynes ya se encuentra elaborando su propio motor con la colaboración de Ford.

Tras asegurar que la unión con Honda fue “un éxito absoluto” y que “seguirán trabajando juntos para lograr los objetivos de este año”, Christian Horner indicó: “2026 será un reinicio completo y, en lo que respecta a la fabricación de nuestra propia unidad de potencia, hace cuatro años teníamos una hoja en blanco”.
“En cuatro años hemos construido una fábrica y desarrollado un motor, pero estamos sumando 75 años de experiencia con Ferrari y 30 años con HPP (Mercedes High-Performance Powertrains), así que no nos hacemos ilusiones. La montaña que tenemos que escalar es inmensa, pero, con el espíritu adecuado y la gente de calidad adecuada que tenemos dentro de la empresa, será alcanzable. Es, con diferencia, el mayor reto que hemos asumido en la Fórmula 1”, concluyó el director de Red Bull.