Los silencios también pueden otorgar respuestas. Poco se dice y se ha hablado de la continuidad de Franco Colapinto en la Fórmula 1 luego de que, a finales de diciembre, la parrilla quedara confirmada con la llegada de Isak Hadjar al equipo Racing Bulls. Sin embargo, aún cuando no hay ninguna butaca disponible, nadie se ha animado a asegurar que el argentino no estará en la Máxima categoría la próxima temporada y son muchas las señales que respaldan la posibilidad de un retorno, ya que hay detalles poco habituales que se han ido acumulando desde el cierre de la temporada.
El desembarco del sudamericano en el Gran Circo generó un impacto tremendo. Velocidad, determinación y carisma es un complemento difícil de encontrar. Si, a la vez, esto está respaldado por un público que hace estallar las redes sociales y sponsors muy interesantes, el combo se vuelve tentador para cualquiera. Lo fue para Red Bull, en un primer momento, que finalmente decidió apostar por su propia cantera. También para Flavio Briatore, quien, como hábil negociante, supo enfriar la situación en el momento oportuno.
Alpine tenía un contrato cerrado con Jack Doohan y la alternativa de Franco Colapinto implicaba un gran desembolso hacia Williams. Difícil que un negociador tan hábil como Briatore, que lo primero que hizo fue una reorganización de recursos en el equipo francés y que hasta decidió optar por un motor Mercedes para 2026 con el fin de generar mayor eficiencia económica, cediera tan fácil ante las exigencias de los británicos. Imposible que, con tanto tiempo por delante, no jugara las cartas a su favor.

Las propias palabras de Briatore lo dejaron en claro cuando declaró ante The Race que está interesado “en cualquier piloto que sea rápido” e incluyó en esa lista a Franco Colapinto, que lo consideraba como «una opción para 2026», pero también aclaró que no tendría pudor en tomar determinaciones contundentes si un piloto no rinde lo esperado. No es ningún secreto que el que estará obligado a responder de manera inmediata es el australiano.
La filtración de que Doohan tiene contrato para tan solo seis carreras llamó mucho la atención. Es algo casi nunca visto, que un piloto rookie que comienza la temporada, tenga tan poco tiempo para demostrar su valía y que esto se haga público. Esto implica que estará en Australia, su carrera de casa, ya que esto fue confirmado por el propio Briatore, pero que después de la gira por Medio Oriente, en el caso de no rendir, su futuro puede ser una incógnita.
Por el lado de Franco Colapinto, hay señales muy concretas. La primera es que, a fin de año, Williams lo despidió de una manera muy particular, algo poco habitual para una escudería que, en teoría, lo mantendría como piloto reserva el próximo año. A la vez, desde Grove todavía no se anunció quién sería su tercer piloto en el caso de que Alex Albon o Carlos Sainz no puedan estar presentes en una carrera.
Esto si lo hizo Alpine, quien ya anunció a Paul Aron, gran protagonista de la Fórmula 2 en la pasada temporada y a quien Colapinto superó en Imola para conseguir un triunfo épico. El estonio es bien conocido por Oliver Oakes, jefe del equipo, que llegó proveniente de Hitech, y parece una opción más para disponer si el plan de Doohan falla.

Las voces ponen a Franco Colapinto en Alpine
A la vez, el silencio de las partes no fue absoluto. En los últimos días se filtró en las redes sociales una publicación del propio padre de Colapinto, quien acompañó una imagen con una sugestiva frase: “Somos pocos los que ya sabemos todo. F1 2025”. La imagen fue borrada en pocos minutos, pero la filtración fue inmediata y el mundo virtual se hizo eco de estas palabras. Una señal más de que algo estaba pasando.
Además, la prensa también aportó datos reveladores. El diario argentino Olé aseguró que “Alpine está por llegar a un arreglo con el argentino con presentación incluida más temprano que tarde, pese a que oficialmente no hay nada ni tampoco, del entorno del piloto lo aseguran… pero nadie lo niega. Desde ya, así, Williams quedará en el pasado, negociación y dinero mediante”.
En las últimas horas, el prestigioso medio “The Race” ratificó esta información, pero aclaró que “no está claro si se unirá de forma permanente o con disposiciones para un retiro de Williams, ya que una transferencia de ´préstamo´ había sido parte de las primeras discusiones, pero Colapinto no tomará inmediatamente un asiento de titular en Alpine”.
Esta situación, en caso de concretarse, derivaría en una superpoblación de jóvenes pilotos dentro de la escudería francesa. A la dupla titular, conformada por Pierre Gasly y Jack Doohan, habría que sumarle la eventual llegada de Franco Colapinto, el piloto reserva confirmado, Paul Aron, y los dos jóvenes talentos de la Academia de Pilotos, Victor Martins y Gabriele Mini.
Por el momento, Mini está confirmado para correr en Fórmula 2 con Prema en 2025 y su talento lo impulsan como uno de los máximos aspirantes al título. En tanto, el futuro de Victor Martins aún no fue develado. Si bien ART todavía tiene una butaca libre en 2025, el francés todavía no fue oficializado para ese lugar.
¿Cuál sería el sentido de hacer una erogación económica por Franco Colapinto con tantas opciones? Sin dudas, hay un diferencial que otorga el argentino y lo pone por encima del resto de los pilotos. Sobre la mesa hay rumores, un contrato limitado para Doohan, filtraciones en redes sociales e información por parte de la prensa especializada. Si algo sabemos de la Fórmula 1 es que hasta el anuncio no hay garantías, pero también que de las señales siempre surgen las certezas.
Un comentario